La cabina de Avon Wildlife Trust es otro ejemplo de una estrategia en la elección de un material que sienta bien al entorno.

El edificio ofrece un refugio estacional para voluntarios, grupos escolares y visitantes de la reserva natural de la garganta de Avon, en las afueras de Bristol. En respuesta al muy modesto presupuesto inicial, el diseño proporcionó un sencillo edificio de uso agrícola que se extiende y adapta. La cabina se asienta sobre una losa de hormigón existente; se han plantado flores autóctonas en las grietas y zanjas del hormigón.

Las compuertas de acero galvanizado permiten que el edificio permanezca abierto a la vista cuando está siendo usado, y completamente cerrado en las restantes ocasiones. El interior está equipado con estanterías y útiles de almacenamiento de madera contrachapada. Un dosel de pino enmarca unas vistas espectaculares y ofrece refugio contra la lluvia.

„Creo que hay una forma especial por el que las personas responden a los materiales sin terminar. Quizá el término natural no sea la manera más precisa de describirlo, pero definitivamente estos materiales engendran una respuesta positiva. Tal vez existe en ellos una simplicidad que resulta fácil de entender, sobre todo en el siglo XXI, con sus exigencias y el impacto de nuestras experiencias digitales. Estar en contacto directo con materiales muy tangibles, que se pueden sentir y tocar, entender y ver en el tiempo, es algo muy importante“.